Rogelio Jiménez Pons, adelantó que trabajan en un proyecto que implica mover el Aeropuerto Internacional de Mérida hacia el sur de la ciudad, con lo cual se permitiría que la estación del Tren Maya quede enlazada con la nueva terminal aérea como sucederá en Cancún.
Cancún, QR (El Economista).- El titular del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons, adelantó que trabajan en un proyecto que implica mover el Aeropuerto Internacional de Mérida hacia el sur de la ciudad, con lo cual se permitiría que la estación del Tren Maya quede enlazada con la nueva terminal aérea como sucederá en Cancún.
Se trata de un proyecto inmobiliario de 2,000 hectáreas que no agregará costo al presupuesto del Tren Maya, pues será enteramente financiado por empresarios inmobiliarios, es decir, Fonatur sólo fungiría como promotor. El diseño general del mismo está corriendo a cargo del arquitecto Enrique Norten.
Jiménez Pons reveló este proyecto durante su participación en la tercera edición de Sustainable and Social Tourism Summit, que se realiza en Cancún del 23 al 26 de junio, donde dijo que aún están en la fase conceptual, por lo que no se trata aún de una decisión tomada, además corresponderá al gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, hacer el anuncio en caso de que se dé luz verde a la obra.
Añadió que el actual aeropuerto de Mérida, “aunque muy exitoso, también ya es muy estorboso”, al haber sido absorbido por la mancha urbana de la ciudad, lo cual justifica su traslado hacia el sur, ya que actualmente Mérida está creciendo de manera “desproporcionada” hacia el norte.
El cambio supone que el Tren Maya tendría dos estaciones en la capital yucateca, ya que se mantendría la estación antigua, que sería la parada urbana del recorrido, cerca del Paseo Montejo, de donde se derivaría la vía hasta la zona sur de la ciudad donde se construiría tanto la estación férrea con mayor capacidad, como la terminal aérea, la cual, al igual que en Cancún, sería operada por el Grupo Aeroportuario del Sureste, confirmó el titular del Fonatur.
Explicó que tienen dos opciones de terrenos de más de 2,000 hectáreas cada uno en los que podría construirse la nueva terminal, lo cual supone no sólo la obra aeroportuaria en sí, sino toda una reorientación del crecimiento de la mancha urbana de la capital yucateca.
Apuesta privada
Jiménez Pons insistió en que este proyecto no supondrá que incremente el costo del Tren Maya, “nosotros no vamos a meter ni un quinto a eso; es un proyecto 100% inmobiliario, una apuesta privada”.
Adelantó que el mandatario Vila Dosal está viendo con simpatía este planteamiento y aunque aún está en fase conceptual, “ya vamos en ese sentido, no podemos ocultar que estamos trabajando en eso”, indicó en una entrevista posterior a su ponencia en el foro de sustentabilidad.
“Nuestro compromiso en este proyecto es entusiasmar a la gente, los inversionistas, porque, insisto, estamos hablando de una cuestión eminentemente privada”, subrayó; la participación federal sería en el otorgamiento de la concesión al grupo que operaría la nueva terminal.
Rogelio Jiménez acentuó que se anticipa la creación una gran área verde, estilo Central Park, en la zona de las nuevas terminales aérea y férrea.
Quinto lugar
De acuerdo con datos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, el aeropuerto de Mérida se ubicó en el quinto lugar nacional en el crecimiento del volumen de pasajeros, con una tasa anual de 11.9% en los primeros cuatro meses del 2019, considerando sólo las 20 terminales con mayor transportación.
Esta terminal se colocó por debajo de Bajío (20.6%), Querétaro (17.4%), Ciudad Juárez (16.2%) y Oaxaca (13.1 por ciento).
