Una arda jornada vivieron restauranteros del Malecón y calles aledañas, ante la ola de visitantes que buscaban un lugar donde comer o comprar sus alimentos.
Mérida, Yucatán a 17 de abril de 2022 (InformaTe Yucatán).- Después de 9 años, la familia de María Feliciana Dzul Quintal, oriundos de Pencuyut, Tekax, regresaron a disfrutar del mar de Progreso.
El camino es largo, el pasaje caro ($280 por persona) y la familia extensa, por lo que el gasto para disfrutar de un día de playa requiere de unos $6 mil pesos, lo que representa un esfuerzo para esta y muchas otras familias, que tienen que ahorrar durante meses para darse este “gusto”.
En esta ocasión, los 16 miembros de la familia de María Feliciana, formaron parte de la avalancha de gente que abarrotó el Malecón de Progreso, donde se nota el semáforo verde y el ‘fin de la pandemia’ del coronavirus, por lo menos para las y los yucatecos.
Para resguardarse un poco del agobiante sol, los turistas y visitantes locales, se ayudaron con casas de campaña, carpas, toallas, sábanas y de la sombra de algunas palmeritas, pese a que el Malecón está inundado de sombrillas azules que le cobran a los visitantes.
Las calles aledañas al malecón internacional de Progreso que recibió a sus visitantes con otra rehabilitación, estuvo abarrotado de camiones, combis, esos que transportan a excursionistas, que cada año -hasta antes de la pandemia- recurrian a esta forma de viajar para recorrer el territorio yucateco.
El mar de gente que se observó este domingo en la costa yucateca, incluida las comisarías de Progreso (Chelem y Chuburná), recuerdan las cifras del 2019, antes de la pandemia del covid19, donde decenas de cubrebocas pasaron a ser parte de las toneladas de basura que dejan los visitantes en las playas.
