Hay cuatro policías por la muerte de Salvador Osmar, quien fue presuntamente torturado luego de ser detenido por la SSP.
Mérida, Yucatán; 16 de noviembre de 2020.-A 13 días de la muerte de Salvador Osmar L.M. a manos de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (CODHEY) emitió un pronunciamiento manifestando su preocupación por estos lamentables hechos.
En un comunicado de prensa la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (CODHEY) manifestó su preocupación por los casos de personas que han fallecido en custodia de las autoridades policiacas municipales y estatales.
En el año de 2018, se registraron 8 fallecimientos, siete bajo la responsabilidad de autoridades municipales y uno de estatales. En 2019, fueron cuatro casos, tres bajo la tutela de policías municipales y uno de la autoridad estatal. Y en 2020, se tiene el registro al mes de noviembre, de 10 fallecimientos, de los cuales seis corresponden a corporaciones municipales y cuatro a la policía estatal.
Del año 2018 a la fecha, la CODHEY ha documentado a través de procesos de quejas, 22 fallecimientos de personas detenidas y en custodia de autoridades policiacas municipales y estatales, los cuales se atribuyen a diversas causas, entre ellas el suicidio en cárceles municipales.
De manera oficiosa, la Codhey inició la queja desde que se dio a conocer el hecho en diversos medios de comunicación, la misma fue ratificada por los familiares del ahora occiso hace unos días.
La Comisión de Derechos Humanos solicitó informes a la Secretaría de Seguridad Pública, así como a la Fiscalía General del Estado a fin de que sean integrados a los expedientes de quejas.
De acuerdo a la Codhey, todas las personas que se encuentran detenidas quedan bajo responsabilidad de las autoridades que los tengan en resguardo, por lo que se hace un llamado a los elementos de las policías estatales y municipales a seguir los protocolos establecidos en las corporaciones, a fin de garantizar la integridad y la vida de las personas durante el tiempo que estén bajo su resguardo y responsabilidad.
Cabe resaltar que cuatro policías estatales -R.C.B., G.R.S., J.R.B.C. y S.I.R.M.- son procesados por la muerte del joven de 31 años que de acuerdo a la autopsia murió estrangulado y no de un infarto como informaron las autoridades en un principio.
