La obra que cumplió 9 años de su construcción, lleva más de un mes inundado por las lluvias de una tormenta tropical.
Mérida, Yucatán a 7 de Julio de 2020 (InformaTe Yucatán).-La decisión de tapar o no el Paso Deprimido, debe estar basada en estudios técnicos y no debe de ninguna manera politizarse, manifestó el ingeniero Alfonso Gonzalez Fernández del Colectivo Sinergia.
Luego de que integrantes Colectivo 4 de Julio y del Frente Cívico Familiar, propusieran tapar la obra que se construyó hace nueve años y que desde hace un mes está inundada por las lluvias que dejó la tormenta Cristóbal, coincidió en que esa podría ser la opción más viable y menos costosa para el municipio.
“Sería la opción más apropiada y menos costosa en obra y no tendría los altos costos de mantenimiento, ya que no se requerirían cisternas ni bombas para desaguar las aguas pluviales, ya que se podrían drenar en un sistema convencional de pozos pluviales o simplemente drenar el agua de lluvia hacia las áreas verdes a través de celdas de bioretención o jardines de lluvia”.
Este tema no debe politizarse y debe resolverse técnicamente con los expertos y la decisión que tome la autoridad, deberá presentarla a la sociedad para que se sepa quien (expertos) lo avalan, manifestó.
“Lo que tenemos que preguntarnos es, que si con las reparaciones que se van a realizar, pueden las autoridades garantizarnos que no va a volver a pasar -inundarse- por lo menos en 30-50 años. Tenemos que saber a ciencia cierta que se va a hacer y si va a funcionar”, apuntó.
La construcción del Paso Deprimido costó en el 2011 poco más de 80 millones de pesos y a nueve años, tampoco se conoce cuanto se ha invertido en mantenimiento. Después del paso de Cristóbal, el alcalde Renán Barrera Concha, manifestó que se requieren unos $10 millones para arreglar las cuarteaduras en la cisterna que drena el agua hacia pozos cercan o a la obra. Aunque realizaron tareas para desaguarlo, los esfuerzos fueron en vano, el agua sigue brotando del subsuelo, debido a una saturación del manto freático.
Recalcó que el costo -económico-político y social- podría más caro que el dinero que se siga invirtiendo a una obra que no se requería en esa zona, ni era urgente como se dijo en su momento y la cual trajo más afectaciones que beneficios.
“Tenemos que saber que se va a hacer y si va a funcionar, porque no es nada más de antojo lo que debemos estar haciendo, debe haber un análisis determinado, con estudios que respalden si son x o y o x+y pesos, no lo sabemos ahorita, y si es barato o caro, es totalmente relativo”.
Explicó que entre los estudios que se deben realizar, están los geo-hidrológicos, ingeniería de tránsito, peatonales, arquitectura de paisaje, jardinería e iluminación arquitectónica, topográficos y de imagen urbana.
Como informamos, el sábado pasado se cumplieron 9 años de que la ex alcaldesa Angélica Araujo Lara diera inicio a la construcción de la obra, que consideran poco funcional, ese día, integrantes de ambas agrupaciones acudieron a la inundada obra donde hicieron pública la propuesta de rellenar la obra y construir una avenida acorde al Siglo XXI que conecte desde el Remate del Paseo de Montejo hasta la carretera Mérida-Progreso.
