Yucatán ya tiene cuatro pueblos mágicos, por lo que Sisal y Maní se suma a Valladolid e Izamal.
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Mérida, Yucatán a 1 de diciembre de 2020 (InformaTe Yucatán).-Desde hoy Yucatán cuenta con cuatro Pueblos Mágicos, tras la designación de Sisal y Maní por parte de la Secretaría de Turismo Federal (Sectur).
El puerto yucateco y el municipio de Maní, se suman a Izamal y Valladolid que formalizaron ese distintivo en 2002 y 2012 respectivamente.
La postulación de Sisal y Maní se dio junto con la petición de cinco poblaciones más que no lograron esta distinción. En total Yucatán postulaba 7 comunidades y este día se conoció la designación de las dos primeras, quedando rezagadas: Tekax, los puertos de San Felipe y El Cuyo, Motul y Muna.
La bicentenaria comisaría de Sisal, municipio de Hunucmá fundada en 1811 y la ancestral Maní, cuyos asentamientos mayas datan del siglo XIII; tendrán ahora la oportunidad de un mayor desarrollo, promoción y proyección turística. El galardón tiene como objetivo complementar las condiciones de cada micro destino turístico para lograr en un mayor impulso económico, también imagen y presencia entre los destinos culturales del estado de Yucatán.
Los dos primeros distintivos que Yucatán obtuvo con la designación de Pueblos Mágicos fueron: Izamal en el año 2002, una década más tarde lo hizo Valladolid en 2012 que ahora despuntan como referentes culturales y que gozan de un sólido respaldo e impulso de la industria turística para incrementar proyectos de inversión y generación de empleos en el ramo de “a industria sin chimeneas”.
En el documento base de postulación, Sisal validó su presencia turística como un destino de playa, con atractivos históricos y de una amplia biodiversidad ecológica, además de que, ahí se ubica un centro de investigación científica de la Universidad Nacional Autónoma de México (Unam).
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La historia del puerto de Sisal se remonta a la primera década del siglo XVI, cuyo nombre original fue Santa María de Zizal, que fortaleció los primeros puntos comerciales entre Mérida y La Habana. Posteriormente, cuando se presenta el distanciamiento social y económico entre Campeche y Mérida en el siglo XVIII, Sisal jugó un papel importante al establecerse como el punto comercial para la exportación del henequén.
Sisal, marcó una presencia histórica al ser el punto que permitió el desarrollo económico y comercial de Mérida, hasta que se formalizó el fundación del puerto de Progreso en 1871.
En su caso, la población de Maní, los historiadores establecen sus primeros asentamientos hacia el siglo XII de nuestra era, cuando se formó y construyó la primera ciudad en el señorío de los Tutulxiues. La familia Xiu, fue la casta dominante en esta zona, llegando a dominar posteriormente Mayapán, hasta su caída hacia los años 1440, que posteriormente migraron para construir Uxmal.
Históricamente, la población de Maní también jugó un papel importante y estratégico durante la denominada época de la colonia, por lo que, se situó en esta comunidad uno de los conventos más importantes a cargo de los franciscanos concluido en 1549.
Maní es recordado también porque, en esa población el 12 de julio de 1562, el primer obispo de Yucatán Diego de Landa realizó el primer “auto de fe” y quemó códices, símbolos e ídolos de los dioses mayas, para entronizar la religión católica y el provecho de los encomenderos hispanos que se adueñaron de las tierras de la familia Xiu.
