Familiares aseguran fue un feminicidio, no un suicidio como alega la Fiscalía.
Mérida, Yucatán a 17 de mayo de 2021 (InformaTe Yucatán).- “No fue suicidio, fue feminicidio”, familiares de Arlette Ariande Heredia Piña, marcharon la mañana de este domingo para exigir justicia por la muerte de su hija, aseverando fue víctima de violencia feminicida por parte de su expareja de nombre Óscar Salazar.
Desde el Remate de Paseo de Montejo, hasta el Monumento a la Patria, los padres de la joven, su hermano, amigas y activistas, marcharon con pancartas que subrayaban que exigían un alto a la violencia contra las mujeres, además resaltar que #Yucatán es feminicida.
Para el padre de Arlette, el señor Orlando Heredia hay inconsistencias en la muerte de su hija, quien a las 5 de la tarde le envió un mensaje, la hamaca con la que dicen que presuntamente se quitó la vida, ni yo la pude quitar -desamarrar-. Ella no sabía ni poner una hamaca, según el expediente hizo un nudo de tres vueltas, además que se hizo un chongo en el pelo, mi hija no se peinaba, andaba con el pelo suelto siempre, desde que vi la foto me di cuenta que ella no fue”, insiste.
Presentó una denuncia para que citen a declarar al novio de su hija, la Fiscalía General del Estado de Yucatán (FGE) se niega, sosteniendo su dicho, fue un suicidio por la vía del ahorcamiento.
“Mi hija tenía planes, al día siguiente iba a ir con su hermano al gimnasio”, manifiesta su padre.
El último mensaje me lo mandó a las 7.05 minutos y según la FGE la hora de su muerte es a las 7 de la noche, afirma.
“Yo quiero que -la pareja- declare, que le hagan exámenes, a mi hija -Arlette- no le quisieron hacer exámenes porque su sangre estaba echada a perder.
La madre de la joven, Arlette Joana Piña Carrillo, pidió a las autoridades no dar carpetazo al caso de su hija, y tomar en cuenta pruebas como la cámara de la casa, porque el novio asegura que salió de la casa y eso nunca sucedió.
Arlette Ariadne tenía 20 años de edad, un año de relación con Óscar y cinco meses de vivir juntos. La pareja compartía vivienda un Prado Chuburná.
Por su parte, la activista Adelaida Salas Salazar, representante del Observatorio Nacional contra el Feminicidio, aseveró que en Yucatán, las muertes de las mujeres se tapan haciéndolos pasar por suicidios.
