“La pandemia nos está mostrando la cara más dura en problemas sociales”, manifestó el empresario Alberto Abraham Xacur, presidente de Canacintra-Yucatán.
Se cumplen siete meses entre pandemia, crisis económica, tormentas y huracán.
Mérida, Yucatán a 14 de octubre de 2020 (InformaTe Yucatán). – Al cumplirse el séptimo mes de la emergencia sanitaria en Yucatán, el impacto social, económico, cultural y religioso en el estado es visiblemente diferente, aun y cuando esta transformación se vaya desvelando paulatinamente en los diferentes estratos sociales, ante a las nuevas necesidades de la población en el proceso de adaptación de la nueva normalidad.
Al cumplirse el día 215 de la declaración de la contingencia sanitaria, desde el 14 de marzo a la fecha, los yucatecos se acoplan a nuevas medidas, disposiciones, actitudes y metodologías en el trato, la convivencia, la movilidad, los horarios en los que discurrían las actividades cotidianas.
CINCO MESES DE CONFINAMIENTO
En siete meses, la sociedad yucateca ha tenido que ir procesando y adaptando a las medidas que implican ahora nuevos condicionamientos para incorporarse a las actividades económicas, educativas, sociales, culturales, religiosas y políticas que se deberán mantener como protocolo de bioseguridad, ya que la pandemia del Covid 19, se mantendrá aun, por un tiempo muy largo.
En Yucatán, la sociedad aceptó, no de muy buen agrado, casi cinco meses de confinamiento y un proceso lento de seguridad y confianza para retomar tareas y actividades que eran parte de su quehacer natural en los últimos dos meses. En medio de todo este proceso, tres fenómenos naturales han ocasionado medidas de mayor presión y estrés y que se han entremezclado con la pandemia.
En opinión de especialistas de salud mental, esta incidencia de problemas ha causado una serie de problemas en el equilibrio emocional de muchas personas. Según explicó Antonio Ruz Denis, psicólogo y terapeuta, diferentes factores como el estrés, la pérdida de la seguridad económica, aspectos de salud que se recrudecieron, el excesivo tiempo de convivencia familiar en áreas muy reducidas están ocasionando una serie de problemas, dentro del núcleo familiar.
Ruz Denis destacó es evidente como se ha incrementado el alcoholismo, el tabaquismo, se agudiza la violencia intrafamiliar, los problemas y roces sociales, además de un notable aumento en los suicidios, primordialmente gente joven, manifestó.
La pandemia nos está mostrando la cara más dura en problemas sociales, apuntó el empresario Alberto Abraham Xacur, presidente de Canacintra-Yucatán. Esta emergencia sanitaria nos está descubriendo aspectos y situaciones de gran impacto entre los grupos de la sociedad que antes no se percibían, comentó.
Es importante establecer, añadió que, los problemas económicos, sociales y de salud se han reflejado en todos los grupos sociales, en la zona urbana y la rural, sin distinción. Estamos aceptando que hay muchos aspectos de la vida que debemos de cambiar y reflexionar en aspectos que antes nos parecían inútiles de discutir, comentó.
“NO ESTAMOS PREPARADOS PARA SALIR DEL CONFINAMIENTO”
No es solo un aspecto personal, comentó Jorge Martínez Ruz, sacerdote católico y vocero de la arquidiócesis de Yucatán, son aspectos de índole general, porque no estábamos preparados para el confinamiento y ahora tampoco estamos preparados para salir de el. Esto implica una reflexión muy importante para todas las personas de cambios necesarios y urgentes en nuestra actitud ante la vida, comentó.
En esta pandemia se ha puesto a prueba nuestra sabiduría, nuestra capacidad de entendimiento, de convivencia, nuestra interrelación personal, incluso nuestra fe, porque esta emergencia sanitaria no está exigiendo retirar hábitos y costumbres y revalorar nuestro ego y nuestra fuerza de voluntad para acompañar el esfuerzo de toda la sociedad a una nueva convivencia.
En siete meses, en Yucatán, unas 75 mil personas perdieron su empleo y su estabilidad económica, tres eventos climatológicos dañaron a cerca de 450 mil personas, con pérdidas en propiedades y recursos; unas 3 mil familias han perdido a un ser querido, muchas veces sin poder realizar los actos funerarios necesarios para acompañar esta pérdida, un alto porcentaje de familias se está enfrentando a nuevos modelos de aprendizaje, con la escuela en casa, son muchos factores, declaró.
Siete meses, un período corto, que se ha hecho largo, sinuoso y muy complicado para muchas personas, debido a su falta de confianza en sí mismos, apuntó la psicóloga Rubí Briceño Correa, más de 30 semanas para cambiar nuestros métodos de comunicación y recuperación de nuestra intimidad, explicó.
PROSTITUCIÓN JUVENIL
Son siete meses de mucha presión en la vida sexual de las personas, indicó el docente y activista de Derechos Humanos, Armando Rivas. En estos últimos meses ha aumentado notablemente la prostitución juvenil masculina, en gran medida ante la falta de oportunidades para jóvenes, un largo período sin actividades educativas y el despido de fuentes laborales tanto formales como informales para chicos homosexuales, señaló.
Estos siete meses han sido un reto enorme para el sector educativo, comentó Carlos Estrada Pinto, Director General de Desarrollo Académico de la Universidad Autónoma de Yucatán. Ha puesto a prueba las condiciones de muchos docentes e instituciones, primero para completar el ciclo escolar y luego, de forma vertiginosa y sin el tiempo necesario, para implementar cursos, contenidos y metodologías educativas ante la nueva realidad de la educación a distancia.
LA VIDA SIGUE CON NUEVAS REGLAS
No ha sido nada fácil, sostuvo el economista y académico Jorge Canché Escamilla, la sociedad yucateca tradicional ha sido duramente sacudida. “Esta nueva normalidad durará mucho tiempo y será preciso aprender a caminar con estas nuevas medidas, solo de esa forma, podrá ser menos difícil procesar y acompasar las acciones que la población requiere para ir a una nueva convivencia social”, comentó.
